Entrando a México

El lunes 26 de marzo de 2012 llegamos a la frontera de México, imagínense la felicidad!! En migraciones todo bien, chiste de por medio, sellan pasaporte y nos dan 180 días para estar en el país, buenísimo!!!
Paso siguiente, la oficina de Aduana, pegadito pegadito… 
Cómo en todos los países, aquí también para ingresar con tu auto como turista, se debe hacer un permiso temporal de importación. La diferencia radica en que en lugar de presentar los papeles en Aduana y luego acercarse al banco oficial a pagar el monto correspondiente por el trámite, uno debe presentar todos los papeles directamente con el banco, es decir, el que expide el permiso es el banco y Aduana solo fiscaliza. Además de pagar el permiso, se debe dejar una garantía que se reintegra al salir del país. Esta garantía se basa en el modelo del vehículo (año de fabricación).
Recuerdan que allá lejos y hace tiempo que por el norte de Perú nos abrieron el auto y nos sacaron un maletín con papeles entre los que se encontraba el título de propiedad del choique? Bueno, desde ahí nos hemos manejado sin problemas con la Cédula Verde…10 países más tarde, con naviera de por medio y todo, nos vienen a verificar el único dato que no figura en dicha cédula, el año de fabricación!!! Cuestión que por este detalle, no nos querían dar el permiso …QUE??? Sí, leyeron bien…y teníamos que dejar el auto en Comitán, una ciudad que queda dentro de México pero a 80 km de la frontera con Guatemala. De ahí en más nos restringían el ingreso…era el fin del viaje para nuestro amado Choique … NOOOOOOOOOOOOOOOOOO.
Pero no se angustien, que la historia no termina acá. Ahí nomás nos pusimos manos a la obra y movimos cielo y tierra…nos comunicamos con Aduanas y ellos nos aceptaban los documentos como estaban pero no podían interceder; con la oficina de VW donde nos emitieron una nota especificando los detalles del auto (fecha de fabricación incluida); con la central del Banco Oficial (Banjército) donde torturamos a medio mundo hasta dar con el Sr. Fernandez quien reconoció que fue un error de ellos y que debían darnos el permiso…y con Calderón, pero no nos atendió, estaba ocupado recibiendo a Benedicto.
Conclusión, hoy desanduvimos el camino hacia la frontera para finalmente hacernos del tan ansiado permiso….ahora sí podremos los tres circular libremente por todo México durante 180 días...
Moraleja, como dijera el poeta Torres….VIVA MÉXICO CABRONES!!!!